Noticias
La estructura Río Vichada
El Sol y los planetas se formaron hace unos 5 mil millones de años a partir de
una nebulosa galáctica de gas y polvo calientes. A medida que el gas se enfriaba
se condensaba en gotas y granos que luego se agrupaban y aglomeraban por la
mutua fuerza de atracción gravitatoria. Formaron entonces cuerpos sólidos
menores de diversos tamaños. A partir de ellos crecieron los planetas y los
sobrantes de ese episodio son los asteroides de hoy.
Los asteroides del
Cinturón Principal giran alrededor del Sol en órbitas casi circulares entre
Marte y Júpiter desde el origen del Sistema Solar. Sin embargo, a ciertas
distancias del Sol, la fuerza de atracción gravitatoria de los planetas los
perturba en su viaje orbital cambiándoles el rumbo. Son las llamadas resonancias orbitales. Júpiter es el responsable principal, con su enorme fuerza de
gravedad, de alterar las órbitas de los asteroides del Cinturón Principal. Los
atrae cambiando una órbita casi circular en una nueva, ahora de forma elíptica
(ovalada). Otro mecanismo de cambio orbital son los impactos y choques entre
asteroides dentro mismo del Cinturón Principal. Ellos producen astillas gigantes
que salen disparadas en nuevas órbitas que las alejan de su lugar de origen.
En muchos casos estas órbitas nuevas se cruzan con la de algún planeta cercano y
éste, a su vez, también perturba otra vez la órbita del asteroide. Muchos
asteroides se mueven en órbitas verdaderamente caóticas por todo el Sistema
Solar interior. Es así como un asteroide que se originó en el Cinturón Principal
se transforma, con el tiempo, en un Asteroide que se Acerca a la Tierra (AAT en
español). En inglés se los conoce como Near Earth Asteroids (NEAs).
Los Asteroides que se acercan a la Tierra (AATs) giran en órbitas
elípticas (de forma ovalada) y como consecuencia su distancia al Sol cambia
mucho en cada periodo de translación. Los planetas giran en órbitas casi
circulares por lo que su distancia al Sol varía muy poco a lo largo de un
periodo de translación. Es por eso que los AATs se cruzan con la órbita de la
Tierra. Si cruzan la órbita terrestre en un punto exacto de coincidencia
entonces el asteroide puede chocar con ella, formando un cráter de impacto y
causando gran daño a la vida.
Los AATs pueden chocar con la Tierra y de
hecho este tipo de eventos ya ha ocurrido en el pasado geológico muchas veces...
y volverá a ocurrir en el futuro. Imagine Usted una roca de 1 km de diámetro
cayendo del cielo a 20 km/s, verdaderamente terrible. Parece fantasía
pura.
Sin embargo es real y se trata de un proceso geológico raro (en la
escala de una vida humana) pero activo y capaz de liberar cantidades colosales
de energía. Un impacto de asteroide es millones de veces más fuerte que el peor
terremoto o la mayor erupción volcánica posible. La razón es la tremenda energía
cinética que el asteroide descarga al chocar contra la superficie terrestre.
Esta última está en directa relación a la mitad de la masa del asteroide (en kg)
multiplicada por el cuadrado de su velocidad (en metros por segundo).
En
promedio un asteroide de medio kilómetro moviéndose a 20 km/s liberará unos
25000 megatones de energía al impactar (1 megatón es un millón de toneladas de
TNT). Para dar una idea, una bomba termonuclear de Hidrógeno libera al detonar
unos 20 megatones de energía. La diferencia entre los impactos y otros procesos
geológicos terrestres está en la velocidad con que se libera la energía. En un
impacto esta última se libera virtualmente en forma instantánea. Una estructura
de impacto de 200 km de diámetro, por ejemplo, ¡se forma en sólo 10 minutos!. Al
chocar, la energía cinética del asteroide se transforma en la llamada onda de shock. Ella consiste en un pico de altísima presión (desde 100000 hasta 5
millones de veces la presión atmosférica normal) que se propaga velozmente (a
varios kilómetros por segundo) a partir del punto de impacto. Tanto el suelo
terrestre como el asteroide que chocó sufren sus efectos. A medida que la onda de shock se propaga va perdiendo fuerza con la distancia, pero, enormes
volúmenes de roca son astillados, deformados, triturados, fundidos, proyectados
hacia el cielo y hasta vaporizados... en sólo unos segundos. Las temperaturas,
en la zona de impacto, pueden superar los miles de grados
Centígrados.
Curiosamente, del asteroide que chocó no sobrevive nada.
Toda su masa se transforma en vapor como consecuencia de los efectos del paso de
la onda de shock que lo castiga.
A consecuencia del impacto se forma una
cicatriz en la superficie terrestre con forma de cuenco circular llamada cráter
o estructura de impacto. En promedio, un asteroide abre un cráter cuyo diámetro
es igual a 20 veces su propio diámetro. Ejemplo: Una roca de 1 km de diámetro
abrirá un cráter de 20 km.
Ya se han catalogado 200 estructuras y
cráteres de impacto sobre la Tierra que tienen desde unas decenas de metros
hasta cientos de kilómetros de diámetro.
En general, los cráteres se
clasifican en:
En general, los cráteres se clasifican en:
- Cráteres simples: Hoyos con forma de taza que nunca tienen más de 5 km de diámetro. El más popular y prototipo en su clase es el Cráter Meteoro, (o Cráter Barringer) de Arizona, USA. Se trata de un hoyo de 1200 metros de diámetro formado hace unos 50000 años por el impacto de un asteroide de unos 40 metros compuesto por Hierro y Níquel.
- Estructuras complejas: Éstas pueden ser de tres modelos:
- De pico central.
- Multi-anillo de Anillo central
- Cuencas multi-anillo
Pueden tener desde unos 4 km hasta 400 km de diámetro. Las mayores son la llamadas cuencas multi-anillo, que tienen el tamaño de países enteros. Se las define como grandes estructuras geológicas circulares que muestran una alternancia de anillos elevados concéntricos y valles hundidos delimitados por fallas geológicas (zonas de fractura).
La estructura río Vichada
Como parte de un programa científico internacional para la detección de nuevos sitios de impacto de asteroides financiado por The Planetary Society, Pasadena, CA, USA, una gigantesca estructura circular fue detectada en la República de Colombia.
La República de Colombia, en Sudamérica, tiene una superficie total de 1.138.914 kilómetros cuadrados y su geología está dominada por los picos y volcanes de la cadena Andina en el Oeste y las grandes cuencas sedimentarias tropicales en el Este.
Una nueva posible estructura gigante de impacto fue descubierta por el autor de este trabajo, en Enero de 2004 a partir del examen de imágenes satelitales a color de los satélites LANDSAT 4, 5 y 7 del SSC-NASA, USA. La resolución máxima de las imágenes consultadas era de 200 metros.
Dicha formación fue bautizada como Estructura Río Vichada. Se encuentra ubicada cerca de la ciudad de Maleza, Comisaría Vichada, Colombia (N 4º30' , W 69º15'), y tiene la forma circular del tipo multi-anillo, con un diámetro aproximado de 50 km.
Imagen satelital multiespectral de la posible estructura de impacto "Río Vichada", en Colombia.
El área en que está ubicada esta estructura circular es parte de la cuenca Llanos que está cubierta por vegetación y jungla tropical húmeda lluviosa. La geología de este sector de Colombia no es, por ahora, conocida en muy gran detalle.
La estructura Río Vichada tiene realmente toda la típica configuración de una estructura de impacto del tipo multi-anillo central. El corazón central consiste en un anillo de cerros bajos de 30 km de diámetro, el cual encierra a una depresión circular de 20 km de diámetro.
En esta zona central interior hay una depresión en forma de cuenca, el relieve es bastante plano y es la parte más profunda de la estructura. La cuenca central está cubierta por jungla y circundada por dos anillos concéntricos compuestos por cerros bajos de no más de 100 m de altura. Un arroyo pequeño corta el primero de estos anillos concéntricos en el sector Este.
El anillo de cerros más externo (el segundo desde el centro) tiene un diámetro de 50 km y en el sector sur el Río Vichada fluye en su curso haciendo un giro en semicírculo perfecto bordeando a la estructura multi-anillo. Esta curva tan evidente en el curso del Río Vichada es un rasgo muy interesante y anómalo, típico de otras estructuras de impacto de asteroides como la de Araguainha en Brasil.
Las rocas expuestas en la estructura Río Vichada son de los siguientes tipos: metasedimentarias y granitos de edad Precámbrica con una extensa cubierta de rocas sedimentarias más jóvenes. La cubierta sedimentaria es una secuencia heterogénea de conglomerados, areniscas y arcillas de edad Oligoceno-Plioceno.
Ellas cubren las rocas del basamento cristalino en las cuencas de relieve negativo. Los anillos concéntricos tienen probablemente sus raíces en la roca granítica Precámbrica. Estudios geológicos comparativos muestran que esta estructura no es de origen volcánico o tectónico.
No estamos por lo tanto en presencia de una estructura terrestre común como, por ejemplo, una intrusión de tipo batolito de rocas graníticas o una caldera volcánica gigante.
La estructura esta evidentemente erosionada por el paso del tiempo y en especial por la acción del agua, la lluvia y el clima tropical.
La estructura Río Vichada es por lo menos más vieja que 30 millones de años y bien podría ella tener varios cientos de millones de años de antigüedad. Podemos estimar con certeza que el asteroide que formó esta posible estructura de impacto tenía unos 2.5 km de diámetro y la explosión del impacto liberó varios miles de Megatones de energía.
Un investigación mas detallada de este sitio esta hoy en marcha. De confirmarse su origen por el impacto de un asteroide, esta estructura se convertiría en la mayor estructura de impacto de un meteorito gigante conocida en Sudamérica. Hasta hoy ese honor le corresponde a la estructura Araguainha en Brasil, (S 16º45' , W 52º59') que tiene 40 kilómetros de diámetro. Dicha estructura fue identificada como un impacto de asteroide y estudiada en detalle en los 80's por el geólogo brasileño Dr. Álvaro Crosta. Dicha estructura brasileña tiene unos 250 millones de años de antigüedad.
A la vista de imágenes satelitales se notan evidentes similitudes entre la estructura Río Vichada y la de Araguainha. Concretamente ambas muestran evidentes anillos concéntricos.
También es muy similar el aspecto que presentan en imágenes satelitales las estructuras de impacto de West y East Clearwater en Canadá, de 32 y 20 Kilómetros de diámetro respectivamente.
El cráter de Araguainha, en Brasil.
Estructuras de impacto West y East Clearwater, en Canadá.
Agradecimientos
A la geóloga Dra. Adriana C. Ocampo (Jet Propulsion Laboratory/ NASA HQ, USA) por su valioso consejo, ayuda y amistad.
Al geólogo Dr. W. Uwe Reimold (University of the Witwatersrand, Johannesburg, Sudáfrica) por su valioso consejo y su amistad.
Este programa de investigación es financiado por The Planetary Society, Pasadena, California, USA.
Referencias
--- De la Espriella R. y colegas: Geología Colombiana Vol. 7, pp.93-106, 1990.
--- Rocca M.C.L.: Rio Vichada: A Possible 50 km wide impact structure in Colombia, South America. Publicado en Inglés en Meteoritics and Planetary Science (MAPS) Vol. 39 (8), Supplement, pp. A90, 2004. Trabajo presentado en el 67th Annual Meeting de la Meteoritical Society, Río de Janeiro, Brasil, Agosto 5-7, 2004.
Maximiliano C. L. Rocca, es Analista de Sistemas y realiza desde hace varios años investigación en los temas de Asteroides que se acercan a la Tierra y de Cráteres de impactos terrestres, financiado por The Planetary Society, CA, USA. |
Tomado de Revista espacial.org
Comentarios
Sólo los usuarios con sesión iniciada pueden comentar. registrarse/iniciar sesiónFrases célebres
La ciencia es la estética de la inteligencia.
Últimos comentarios